Formas del vacío
Lo que aquí se propone es un diálogo entre la forma
y su negativo, el vacío.
Un vacío que adquiere tanto o mayor protagonismo
que la propia forma y que, por tanto, no es entendido como carencia sino como plenitud.
Se plantea, así, una relación entre forma y vacío que involucra al propio espacio arquitectónico, éste es, ahora, parte activa de la obra. La fotografía se instala sobre un muro pintado de negro que da profundidad y transforma el espacio de la galería. Una plancha de aluminio corta el muro y se integra en él otorgándole un nuevo sentido. Ambos se significan conformando, así, una única pieza. Unas planchas de caucho negro interaccionan con el suelo y las columnas activando relaciones y diálogos entre obra y espacio.
Se trata, en definitiva, de una suma de relaciones e interacciones espaciales donde lo relevante no son las obras en sí mismas sino los diálogos entre forma y vacío que aquí se generan. Un planteamiento global donde lo significativo será la experiencia resultante, es decir, lo que acontece y cómo acontece.